A sol y sombra. No se despega ni un milisegundo, todo lo contrario. La China Suárez se muestra compulsivamente en cada minuto de vida de Mauro Icardi, por eso lo sigue a todos lados e inclusive se encarga de registrarlo y reportarlo con frenesí en sus redes sociales.
Desde que descubrió que su corazón latía a máxima velocidad por el delantero, a escasos días de la separación definitiva de Wanda Nara, María Eugenia se movió con una rapidez inusitada para convivir con su nuevo novio, por lo que se instaló en la mansión de Nordelta y desde ahí viajó a cada travesía por Europa a su lado.
La actriz ni siquiera se despegó de Icardi en las escasas reuniones con Francesca e Isabella, a pesar de las recomendaciones concretas y tajantes del Ministerio Público Tutelar. Esa pulsión de perseguirlo representa un peligro concreto, una consecuencia extremadamente grave.
Resulta que la Justicia redactó un dictamen para autorizar a Mauro a encontrarse con sus dos hijas en el contexto del Día del Padre, pero especificó en el documento oficial que la China no puede acercarse bajo ningún punto de vista, más bien todo lo contrario.
LE PROHIBIERON A LA CHINA SUÁREZ ACERCARSE A LAS HIJAS DE WANDA NARA
La resolución apareció en Intrusos, donde exhibieron la misiva y permitieron dilucidar la decisión irrestricta de las autoridades. “Sólo podrán estar presentes Mauro Icardi y las niñas, sin la presencia de María Eugenia la China Suárez Rivero”, reza con especificidad la carta.
Y luego se define la sanción tremenda que podría caberle al futbolista si obliga a sus niñas a compartir tiempo con la actriz: “En caso de incumplimiento o de cualquier acto de hostigamiento o perturbación hacia las niñas, se configurará el delito de desobediencia y podrá disponerse la suspensión provisoria de la comunicación paterno-filial”.