Luego de la malograda reunión que sostuvieron este lunes el presidente de la AFA, Claudio “Chiqui” Tapia, y autoridades del Gobierno de la Ciudad, en un intento de coordinar el regreso de los visitantes a los estadios del fútbol argentino, que tras la negativa de los clubes se postergó para el año que viene, comenzó el fuego cruzado entre el tesorero de la AFA, Pablo Toviggino y el jefe de Gabinete del gobierno de Javier Milei, Guillermo Francos, al que se sumó luego la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, con una carta documento y amenazas contra el dirigente.
De nada sirvieron las exitosas pruebas piloto en lnstituto-River y Lanús-Rosario Central, en Córdoba y Provincia de Buenos Aires, respectivamente. De la anunciada reunión entre la AFA y autoridades de seguridad del Gobierno de la Ciudad, participaron Tapia y Andrés Patón Urich, abogado de la AFA, y Maximiliano Piñeiro, secretario de Seguridad de CABA, y Juan Manuel Castrilli, subsecretario de Eventos Masivos y Deportivos. No hubo acuerdo y se postergó la decisión para 2026.
Uno de los argumentos de peso que esgrimen los clubes porteños es que desde la prohibición del público visitante en 2013, muchos llevaron adelante diferentes reformas para adaptar sus estadios a la hinchada local: quitaron alambrados y se modificaron sectores para darle mayor comodidad al socio. El problema es que en muchos casos esas obras no pueden retrotraerse en el corto plazo.
A modo de ejemplo, el partido que iba a funcionar como prueba piloto en la Ciudad era Huracán-Boca. El Tomás Adolfo Ducó, estadio del Globo, no tiene alambrado en la tribuna visitante y debían salir de urgencia a colocar uno. Pero hay otras tres cuestiones que afectan a la mayoría de los clubes.
Además, los clubes “chicos” le piden reciprocidad a los grandes, o sea que también les vendan entradas a ellos cuando les toque ir a sus estadios. Por lo pronto, Boca y River no tienen el menor interés en recibir hinchas visitantes. La ecuación es clara: les conviene poder darle más entradas más a sus socios, que además de pagar el boleto abonan una cuota todos los meses, que a un club que quizá ni siquiere llene la tribuna. El propio Tapia destacó la semana pasada que cada club decidirá si quiere recibir visitantes o no.
Otro tema a tener en cuenta es que si hay parcialidades de ambos equipos se requiere de un operativo policial más grande, cuyos costos siempre asume el club local. Y si las obras de infraestructura, la no reciprocidad y las cuestiones económicas no son suficientes, se suma otro problema: los clubes con barras disidentes, o sea peleadas con la oficial. En muchos casos, la solución que se halló fue que se colocara cada una en una popular, pero si los visitantes regresan, se generará un foco de conflicto.
Reacción de Toviggino
El tesorero de la AFA y mano derecha de “Chiqui” Tapia arremetió enseguida contra el jefe de Gabinete, Francos, quien en declaraciones radiles acusó a la AFA de hacer política con la vuelta de los hinchas visitantes. Francos señaló el “rol político” de la medida y Toviggino, a través de la red social X, respondió con todo. “Te equivocás, hombrecito de dientes amarillos. Si el Comandante (por Chiqui Tapia) y yo, jugáramos un rol político, te aseguro que el justicialismo tendría una discusión menos en sus listas de candidatos. Nosotros sólo administramos fútbol hace 8 años. Ese fútbol argentino que lleva en sus hombros, en ese breve lapso, algunos logros, como una Finalisima, dos Copas América y una Copa del Mundo”, escribió el dirigente, y agregó: “Además hablás de algo que desconocés y que supera cualquier razonamiento particular y/o gubernamental”. Para finalizar su posteo con un: “Te deseo un ‘MUY FELIZ Y TRISTE FINAL … PRONTO!!!’. Ocúpate de los Gobernadores, que me parece que te borraron de su agenda, y dejá que del Futbol Argentino nos ocupamos nosotros”.
Respuesta de Francos
Francos no se quedó atrás y, también con ironía, en declaraciones a LN+ contestó: “Este personaje… me dijo que tenía los dientes amarillos… en todo caso me fijaría si tiene los dedos verdes, por lo que toca (…) La realidad es que me resultaba un personaje desconocido hasta que investigué en lo que hace. No dije nada que no fuera de conocimiento común de la gente. Dije que la autorización de hinchas visitantes en una cancha era una utilización política de la AFA. Tengo alguna sospecha de que está metida en política”. Y lo chicaneó: “Pero ¿cuántos goles hizo Toviggino? La Copa del Mundo la ganaron Messi, Di María, De Paul, todos los jugadores que intervinieron en ese equipo sensacional que le ganó a Francia. No sé qué hizo Toviggino para adjudicarse el triunfo, en todo caso se lo podría adjudicar a Scaloni, que armó un gran equipo”.
La carta de Bullrich
Entre el fuego cruzado apareció Bullrich, compartiendo por la red X su mensaje a Toviggino y la copia de la carta documento que le envió al tesorero de la AFA al que insta a que se retracte de sus dichos contra el jefe de Gabinete. “Al Tesorero de la AFA que se cree con derecho a desearle la muerte al Jefe de Gabinete: retráctese o enfrentará las consecuencias”, lo amenazó la funcionaria. “Si queremos volver a tener público visitante en las canchas, necesitamos una AFA que dé el ejemplo, no dirigentes que se comporten como barras bravas”, esgrimó la ministra.