Aún sin despacho en el Senado -recién a partir del 10 de diciembre podrá ocupar las amplias oficinas del primer piso del Palacio Legislativo-, la vicepresidenta electa Victoria Villarruel volverá este martes a la Cámara alta para mantener una serie de reuniones.
Una, clave, será con la bancada de la UCR. Villlarruel busca cerrar un acuerdo que le permita alcanzar los 37 votos en la sesión convocada para este jueves y, así, desplazar a las actuales autoridades peronistas del Senado, que según el reglamento tienen mandato hasta el 24 de febrero del año que viene. También está previsto que el jefe de la bancada peronista, José Mayans, se reúna con un emisario de la vice electa.
Por su envergadura, no es un acuerdo que pueda cerrarse solo en el Congreso. Por eso, según trascendió, algunos gobernadores electos de Juntos por el Cambio, como el mendocino Alfredo Cornejo y el chubutense Ignacio Torres, iniciaron conversaciones con jefes de fuerzas provinciales que cuentan con senadores que les responden políticamente.
Son los casos del rionegrino Alberto Weretilneck, el misionero Carlos Rovira y el santacruceño Claudio Vidal. Sus fuerzas políticas suman en conjunto 5 senadores.
Sobre un total de 72, el Frente de Todos tendrá desde la semana que viene tiene 33 senadores; Juntos por el Cambio, 24; La Libertad Avanza, 7; y el peronismo disidente, 3.
Victoria Villarreal con Guillermo Montenegro, diputado electo de LLA y armador de la futura vicepresidenta.En principio, Villarruel contaría con los 7 propios y con los 24 de JxC. La cuenta da 31. Aún le faltarían 6 para alcanzar la mayoría. Eso es lo que está buscando cerrar contra reloj.
Sucede que Cristina Kirchner llamó a sesión especial del Senado para este jueves. El motivo de la convocatoria es uno solo: la jura de los 24 nuevos senadores, entre ellos, los 7 de la Libertad Avanza.
En esa misma sesión, el futuro oficialismo apuntará a que se elijan a las nuevas autoridades de la Cámara alta -su presidente provisional y los vicepresidentes- y también dos cargos ultra clave para la gestión parlamentaria: las secretarias Administrativa -maneja la caja del Senado- y la Parlamentaria, que decide entre otras cosa los giros a comisión que se le dan a los proyectos de ley.
Más allá de la cuestión reglamentaria y la posible falta de voluntad del bloque peronista, Villarruel podría encontrar otra traba. Si lograse forzar una sesión para elegir autoridades nuevas, ni ella misma ni los 7 senadores electos de LLA estarían en la sesión porque sus mandatos recién se iniciarán el domingo.
Sería una situación completamente inédita. Si lograsen elegir, por ejemplo, al libertario Francisco Paoltroni como presidente provisional (es el candidato de Javier Milei), el senador electo por Formosa recién podría asumir su cargo después del 10.
Otra paradoja. Sin un solo senador propio, ¿quién propondría en esa eventual sesión a los candidatos de LLA para la Presidencia Provisional o las secretarias Administrativa y Parlamentaria? ¿Un aliado?
En el bloque del PJ se reunirá este miércoles para consensuar qué hacer, aunque insisten con que los mandatos duran hasta febrero.
José Mayans con Victoria Villarruel, en las oficinas del bloque del PJ en el Senado, la semana pasada.Una alternativa que se baraja en algunos sectores es que este jueves no se reelijan autoridades y que la semana que viene, tras una negociación con el peronismo y ya supuestamente en sesiones extraordinarias convocadas por Milei, Villarruel llame a una sesión en la que ya podrán participar los 7 senadores de LLA.
Eso sí: este lunes circulaban versiones de fuertes tensiones internas entre los propios 7 senadores libertarios. Y eso que aún siquiera juraron.