Desde el viernes al mediodía y hasta las 12 de este sábado, los pilotos de Aerolíneas Argentinas encabezaron un paro por tercera semana consecutiva. Tras su finalización, aún persistían esta tarde las demoras y cancelaciones.
Por la medida de fuerza de 24 horas de la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA) y la Asociación Argentina de Aeronavegantes (AAA), Aerolíneas Argentinas contabilizó 319 vuelos y 37.000 pasajeros afectados entre viernes y sábado, que si se suman a los paros de los dos viernes anteriores suman 522 vuelos y 69.500 pasajeros en total.
El primer vuelo que despegó de Aeroparque luego de otro paro salvaje fue el AR 1780 con destino a Iguazú, que lo hizo casi con dos horas y media de demora. Sólo en Aeroparque, seis de los vuelos previstos para la tarde y noche de este sábado fueron cancelados, por el «efecto arrastre» de los aviones que no llegaron y por ende no pudieron partir.
Este sábado, según habían dicho a Clarín fuentes de la aerolínea, la operatoria prevista era un 10% mayor que a un día de semana habitual, por el inicio de las vacaciones de septiembre que tienen en muchas escuelas y los viajes de egresados.
“Tenía que viajar en un vuelo con destino a Salta y el avión salía a las 15.20. Ayer vi todo el desastre que hubo acá en Aeroparque, pero pensé que eso no me iba a pasar porque mi vuelo salía después de que terminaba el paro, pero cuando llego me avisan que está cancelado. Ahora estoy viendo qué hacer, creo que me van a dar hospedaje y saldré mañana”, manifestó Mónica Gutierrez (54) mientras aguardaba en la terminal aérea.
Si bien el panorama era distinto al de ayer, donde los mostradores de atención al cliente desbordaban de personas invadidas por el enojo y el fastidio, las filas para embarcar hoy eran largas, porque la gente prefirió salir con mucha antelación de sus hogares o hoteles por si ocurría algún imprevisto de la aerolínea.
“Ayer nos afectó el paro, pero la verdad que ellos respondieron, dentro de todo, bien nos dieron viáticos y hospedaje. Ayer teníamos que salir a las 11 y ahora vamos a salir a las 15.30. Nos dijeron que tengamos paciencia, pero por ahora está todo bien”, remarcó Amelia que viajaba a Río Gallegos, en referencia a Aerolíneas Argentinas.
Un empleado del aeropuerto aseguró a este diario que hasta el momento se registraron algunas demoras y muchos vuelos sobrevendidos. “En cuanto a los cancelados son los resabios de ayer, porque no se llega a igualar la operatividad para compensar la falta de ayer con la normalidad de hoy. Durante hoy y mañana la situación debería normalizarse”, aseguró.
El paro de 24 horas también afectó a los vuelos que quedaron al margen de la franja horaria de la medida de fuerza, como fue el caso de Alejo Landriel (26) que salía desde El Calafate con destino a Buenos Aires. “Tenía programado un vuelo para el sábado a las 17.30 y llegaba a Aeroparque y hoy me mandaron un e-mail diciendo que hubo modificaciones en mi vuelo y cuando entro el correo decía que llegaba el domingo a las 00”, remarcó.
“Además, me cambiaron el aeropuerto y me mandaron a Ezeiza, cuando la realidad es que pagué más caro para ir a Aeroparque. Perdí tiempo, plata y casi que tengo un día menos porque si yo llegaba a la hora original tenía toda la noche para hacer algo”, agregó.
AS